De la noticia aparecida hoy en un diario

Arthur C. Clarke cumple hoy noventa años. Lo celebrará en su casa de Colombo, en Sri-Lanka, donde reside desde 1956. El escritor que ideó algunas de las aventuras espaciales más famosas de nuestro tiempo lleva casi dos décadas postrado en una silla de ruedas a causa de una grave enfermedad. Sin embargo, su cerebro sigue en buena forma, combinando los materiales de la inteligencia, el conocimiento y la imaginación.

Hace unos días, Clarke grabó un mensaje televisado con las reflexiones que le sugería el estar a punto de completar «noventa órbitas alrededor del sol». Comenzó con un chiste de Bob Hope: «Uno sabe que se ha hecho viejo cuando las velas le cuestan más dinero que la tarta». Después habló brevemente de su pasado, de la vida que lleva ahora y de asuntos como el turismo espacial o las nuevas tecnologías. También especificó cuáles serán sus tres deseos de cumpleaños. El primero: encontrar alguna señal que indique la existencia de vida extraterrestre. El segundo: la adopción inmediata de una fuente de energía limpia e inagotable que sustituya a los combustibles fósiles. El tercero: la paz para Sri-Lanka y para el mundo.

Desde la atalaya de su larga edad, Clarke dice sentirse afortunado por haber podido llevar a cabo sus sueños. Confiesa que emplea muchas horas recordando los viejos tiempos. Quizá rememora sus largas inmersiones en el océano cuando aún podía practicar una de sus grandes pasiones: el submarinismo. Y seguro que echa de menos a sus viejos amigos, personajes como Isaac Asimov o C.S. Lewis, el creador de 'Las crónicas de Narnia', con quien tuvo relación en los años cuarenta y cincuenta.

Muertos Asimov y Robert A. Heinlein, él es el único superviviente de los llamados 'Tres Grandes' de la literatura de ciencia ficción. Su extensa obra tiene el carácter inspirador y fundacional de los clásicos. Ha tratado todos los temas del género, desde el encuentro con extraterrestres a la distopía científica, desde el viaje en el tiempo hasta la destrucción de la Tierra. Su estilo es simple y preciso, alegre, siempre suavemente humorístico. Muy británico. Es un extraordinario autor de relatos cortos, merecedor de estar en cualquier antología no circunscrita a la fantasía científica.

Y además es un hombre de ciencia. Uno especialmente competente. Tras servir en la Segunda Guerra Mundial como especialista en radares, estudió Matemáticas y Física y en 1945 fue el primero en proponer la puesta en órbita de satélites de comunicaciones geoestacionarios. Fue el paso inicial de una de las revoluciones tecnológicas del siglo. Para valorar convenientemente su importancia, deberíamos murmurar su nombre cada vez que vemos en directo una retransmisión deportiva que se celebra en las antípodas, llamamos por el móvil o requerimos la ayuda de nuestro GPS.

Visión de futuro

Suele repetirse que Arthur C. Clarke es también un visionario: alguien capaz de pronosticar con un buen porcentaje de acierto cómo será nuestra vida en el futuro. Por supuesto, esta capacidad no es más que una mezcla de imaginación y conocimiento, olvídense de la clarividencia. En un libro de 1979 titulado 'Fuentes del paraíso', Clarke cuenta la historia de un ingeniero que trabaja en la construcción de un ascensor espacial, un alucinante ingenio capaz de poner en el espacio grandes naves y cargas sin necesidad de lanzarlos por medio de un cohete. Hoy la Nasa estudia la posibilidad de construir esos ascensores con nanotubos de carbono.

A sus noventa años, Arthur C. Clarke recuerda un poema de Kipling y afirma que quiere ser recordado «por los libros que dejo atrás». Cree que lo más importante que ha hecho es estimular la fantasía y el amor por la ciencia en sus lectores. Suele repetir que nada le hace sentir más orgulloso que saber que hay astronautas que se sintieron interesados por el espacio leyendo sus libros. Hoy volverán a entrevistarle y él volverá a mostrarse apasionado y optimista.Cree firmemente que en el futuro viajaremos a la Luna como hoy viajamos a destinos exóticos dentro de la Tierra. Cuando llegue ese día, no será extraño que una hermosa avenida lunar lleve su nombre.


Pues lo dicho, zorionak figura !!

16 Diciembre 2007, 16:04:22

Felicidades y ke aguantes hasta dios sabe kuando, siempre me ha sorprendido este escritor

Felicidades a este escritor, padre de la ciencia ficción, y que gracias a él tuvimos un disco como TSODE. ¡A cumplir muchos más!

PD: Algún día tendré que leerme 2001 y el de TSODE.

Morpheus dijo: Felicidades a este escritor, padre de la ciencia ficción, y que gracias a él tuvimos un disco como TSODE. ¡A cumplir muchos más! PD: Algún día tendré que leerme 2001 y el de TSODE.

SG_Junior dijo:

Morpheus dijo: Felicidades a este escritor, padre de la ciencia ficción, y que gracias a él tuvimos un disco como TSODE. ¡A cumplir muchos más! PD: Algún día tendré que leerme 2001 y el de TSODE.

Aún no te los has leido!!!!!!!! madre mia

no están mal (2001  es más digerible y liviano qeu la peli..que a su vez está basada en un peqeñito relato titulado "the sentinel" )...pero aunque clark es bueno me sigo qeudando con ese fucking crack que era isaac asimov

Muchas felicidades

Me encanta que las nubes salgan bien

2001 va después de que me terimen la trilogía primera de Dune (voy por el primer libro), a ver que tal está . . .

90 tacos, ya firmaba yo....

Pues yo cumpli años el sabado 15. Como esta vez aqui nadie ha avisado, nadie me ha felicitado. Por tanto me he tomado yo solo las copas, el jamon y la caja de gambas. Pero os quiero. Saludos.