Leyendo un artículo dedicado a la promoción de TB2 publicado en el semanal Music & Media de agosto de 1992, he descubierto algunas cosas que no sabía.

La primera es la confirmación (al fin) de quién se encargó del diseño del disco: Michael Nash. Nash ha sido el diseñador responsables de decenas de discos desde mediados de los 80. Es extraño que nunca haya figurado en los créditos de TB2, ni en las reediciones del disco (que, afrontémoslo, han sido escasas y poco cuidadas). 

Según este artículo, en los anuncios que iban a poner para promocionar el disco en forma de carteles no figuraría ni el nombre del disco ni el artista. ¿Alguien los llegó a ver en su día en el Reino Unido o por ahí? 

Os dejo aquí abajo el resto del artículo, en el que explican los intringulis de la campaña promocional que tenían planeada, con una previsión de ventas de cerca del medio millón de copias en menos de 3 meses.

¿Alguien se atreve a decir cuántas copias vendió Return to Ommadawn en todo el mundo?

Amplío:

Semanario Music & Media, 24 octubre 1992.

Foto de la entrega del disco de platino por TB2 en España por la venta de 150.000 copias ya de salida.

(clic para ampliar)

Anuncio de Tubular Bells 2 celebrando la venta de 1 millón de copias de TB2, octubre 1992.

 Me flipa cada vez más todo el jaleo mediático que hubo alrededor de Tubular Bells II. Aparte de que le tengo muchísimo cariño a este disco, cuando lo ves con perspectiva, conociendo la carrera completa de Mike, te das cuenta de que fue un "ahora o nunca" que, afortunadamente, salió bien. 

Pues diré que, de toooodos los reworkings de la campana, que mirad que hay un ciento, puede que sea el más rompedor y potente de ellos, el que realizó Michael Nash. No solo por los colores que le dió, y por el cambio en su extructura, por así decir, al aparecer más suave, menos 'metaloso', si no porque ha pasado la prueba del tiempo de maravilla, consiguiendo permanecer en nuestras retinas. Y ha conseguido ser un digno diseño para un digno disco, este TBII, la única secuela que debería existir, según mi opinión. Para este trabajo Mike consiguió realmente alterar todas las melodías originales convirtiéndolas en nuevas, pero sin que dejaran de mirarse en sus hermanas primogénitas, a la vez que logró estupendas composiciones; una especie de protorobertreed de sí mismo, pero en bueno. Y lo mismo ocurre con el diseño del arte del disco, es una versión cojonuda de la de Trevor Key, la original, y que rompía con el misticismo del mar y los huesos odisea2001 y esas cosas tan setenteras, para pasar a esa elegancia serena tan característica de esos años: colores planos, ideas claras, mensajes directos.

 A mí también me parece que la portada del TBII es una preciosidad. Y todo el disco es una gozada: lo que se pierde en la frescura y espontaneidad del primer disco se gana en madurez, solidez melódica, limpieza en el sonido (lo que desagrada a varios, y lo entiendo, pero para mí es un plus), ideas más claras en cuanto a la producción para que el disco entre como un tiro y perdure... Creo que es una secuela de lo más sólida y orgánica, en el sentido de que es el resultado inevitable si echamos la vista atrás, a la trayectoria de Mike durante los años anteriores. Todo conduce de forma natural hasta TBII, incluso teniendo en cuenta lo que metió la mano Trevor Horn. 

concuerdo con lo de la portada

 Un diseño muy logrado, dándole un arire diferente y una tipografía muy adecuada, todo el libreto es muy elegante.

Mucho mejor que la era Smee 

sube

 Pues a mí no me mola NADA la campana en amarillo. 

Rs tremendamente simple, parece hecha con el Paint

No estaría Michael Nash en el Studio Pastelle diseñando esto en 1990 ¿verdad?

Sip, dos añitos antes, además, el de Jarre. Mismos colores, misma idea... Pero diría yo afirmo que la copia (en caso de que el de Oldfield sea un diseño, cuando menos, inspirado en este otro) es mejor que el original. A veces pasa, uno tiene una idea, y otro la mejora. Por cierto, ¡qué bien lo pasé escuchando este disco del francés! ¡Y mejor aún el día que pusieron el directo de París en la tele!

 Creo recordar que lo pusieron para despedir el año pero no recuerdo cual.